sábado, 14 de marzo de 2009

LA CIUDAD: EL LUGAR EN DONDE VIVO


Ella tenía que hacer un ensayo acerca de la ciudad, así que decidió preguntarle a varias personas que significaba la ciudad para ellos para después sacar sus propias conclusiones. Le preguntó a su mamá, y ésta sin mucho pensarlo y para salir del paso respondió “Es el lugar en donde vivo”. Ella no estaba conforme, quería una respuesta más compleja. Pensó que a todo el que le preguntara iba a dar una respuesta como esta, nada seria, nada pensaba, nada compleja. Así que investigó, leyó y leyó. Mientras más leia y de más información se llenaba más se daba cuenta de la razón que tenía su mamá. Esa respuesta tan espontánea, tan natural, eran más que seis palabras formando una oración, había mucho más detrás de eso.

Porque con “vivir” no se refería a respirar. Vivir es salir de tu casa y saludar al vecino. Vivir es levantarse e ir a trabajar. Vivir es alimentarse e ir a comprar ese alimento. Vivir es caminar, es compartir, es intercambiar ideas, sueños. Vivir es bienestar. Vivir es movimiento, es dinamismo. Vivir es convivir. 

Y la ciudad es el contenedor de estas vidas. Es el lugar que permite que vivamos, que nos relacionemos, que intercambiemos. Esta corta palabra abarca la mayoría de las actividades del quehacer humano, sus necesidades y su cultura. En ella se relacionan la vivienda, el comercio, la industria, la educación, la recreación y juntas en diversas respuestas físicas conforman el lugar del universo más común al hombre. He aquí la relación de la arquitectura con la ciudad. Estas respuestas físicas, estos edificios son los que dan fe material de la existencia de una sociedad. Son los que permiten que se den las actividades del ser humano. Son los elementos estructurantes de la ciudad, la materialización de la historia y la cultura de esa ciudad. Estas edificaciones son también las que definen los espacios públicos. Y del diseño y la ubicación de estos depende el comportamiento y la movilidad de esta ciudad. 

Ha aparecido un nuevo factor, el de movilidad. Y es que con el pasar del tiempo las ciudades fueron creciendo y las diferentes actividades de las personas se fueron separando y zonificando, ya sea por problemas de salubridad, higiene, densificación, etc. lo que obligó a que el transporte publico fuera parte importante de estas ciudades. Y es que si las ciudades estaban creciendo lo más lógico es que crezcan como unidades y no como pequeños sectores, lo que cuarta las posibilidades de intercambio de toda la ciudad, y de que haya más pluralidad, más diversidad, variedad, más colores. 

El transporte publico no solo ha sido el encargado de movilizarnos a los lugares de actividad. El solo es un evento en si. Un evento de encuentro, de intercambio y de convivencia. Por esto ya forma parte importante de nuestras vidas, y forma parte importante de la ciudad y de su funcionamiento. 

Por eso la ciudad es el lugar en donde vivo. Es el lugar en donde me levanto, trabajo, me muevo, me divierto. Por eso, sin mucho pensarlo, su mamá le dio la mejor respuesta que le pudo haber dado. Por eso, aunque no lo queramos, los padres siempre tienen la razón.

1 comentario:

Jesús Escovar dijo...

para mi, caracas por un día fue cultura musical, para días después fue cultura musical pero de otro tipo, para el día siguiente, fue cultura de sol y mares...

eso cuenta no??